La Comisión Europea ha decidido incoar un procedimiento de infracción mediante el envío de una carta de emplazamiento a Irlanda [INFR(2023)2178] por no cumplir plenamente las obligaciones establecidas en la Directiva sobre el tratamiento de las aguas residuales urbanas (la Directiva 91/271/CEE).
La Directiva tiene por objeto proteger la salud y el medioambiente, exigiendo que las aguas residuales urbanas se recojan y traten antes de verterse. Las aguas residuales no tratadas pueden poner en peligro la salud humana y contaminar los lagos, los ríos, el suelo y las aguas costeras y subterráneas.
En ocho aglomeraciones de Irlanda con una población de más de 2.000 habitantes, las aguas residuales urbanas no se tratan adecuadamente antes de ser vertidas. Otras tres aglomeraciones con más de 10.000 habitantes vierten aguas residuales en zonas sensibles sin el tratamiento más riguroso que exige la Directiva. Por tanto, la Comisión envía una carta de emplazamiento a Irlanda, que dispone ahora de dos meses para responder a ella y subsanar las deficiencias señaladas por la Comisión. De no recibirse una respuesta satisfactoria, la Comisión podría optar por emitir un dictamen motivado